GUILLERMO PÉREZ VILLALTA, ESPAÑA. 1948
15-MINUTOS DE "INTERRUPCIÓN" EN LA BIENAL DE ESTAMBUL
Plan de Bienal de Estambul Artistas 15-Minute "Interrupción" 01 DE SEPTIEMBRE 2015 Bienal de Estambul de Carolyn Christov-Bakargiev abre esta semana, y un grupo de artistas tienen la intención de infundir la abertura con un reconocimiento de la reciente agitación política que aflige a la minoría kurda de Turquía. Una carta enviada esta mañana a todos los participantes bienales "proponer [s] que todos suspendemos presentación de nuestros trabajos durante 15 minutos durante la inauguración de la Bienal" en reconocimiento a la ruptura violenta en las conversaciones de paz entre el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y el gobierno de Turquía en las últimas semanas. Firmado por participante bienal basado en Mardin Pelin Tan y su Colectivo ArtikIsler, junto con el editor de artista y e-flux Anton Vidokle, la misiva pretende infundir un sentido de urgencia en lo que ya es un programa bienal políticamente sensible. "Con Anton, pens...
Fecha: 1975-1976
ResponderEliminarTécnica: Acrílico sobre lienzo
Dimensiones: Tríptico: 193 x 373 cm / Pieza 01: 193 x 106 cm / Pieza 02: 193 x 161 cm / Pieza 03: 193 x 106 cm
Categoría: Pintura
Año de ingreso: 2006
Nº de registro: AD04502
Grupo de personas en un atrio o alegoría del arte y la vida o del presente y el futuro retrata a la generación de artistas, críticos y galeristas asociada al fenómeno conocido como Nueva figuración madrileña, surgida en la capital de España durante la década de 1970 y formada por individuos provenientes de diversos lugares del país. Cada uno de los personajes, incluido el autorretrato que Guillermo Pérez Villalta introduce en la escena, se define a través de su posición, sus gestos, su actitud y algunas referencias simbólicas, a la manera de otras escenas de grupo de la historia del arte, como La Escuela de Atenas y El Parnaso de Rafael o Au rendez-vous des amis de Max Ernst. Este grupo impulsó un cambio en el panorama artístico español, reivindicando el valor de la pintura concebida desde una visión libre, subjetiva y despolitizada, frente a las prácticas artísticas conceptuales que alcanzaron primacía en la década de los setenta. Grupo de personas en un atrio [...] pertenece a la primera etapa de Pérez Villalta y es, por su significación histórica, una obra central en su producción, que refleja ya características inherentes a su trabajo: factura clásica con colores contrastados, universo alegórico, dimensión autobiográfica, análisis de la articulación espacial y una acumulación ecléctica de referencias que aluden tanto a la tradición de la pintura como a la cultura popular.
www.museoreinasofia.es- Se refiere a la primera obra, Salida de un concierto de Rock.
“Souvenir de la vida. El legado de Guillermo Pérez Villalta” fue el título de la exposición que supuso la catálisis de un legado en el CAAC, allá por finales del año 2013 y también comisariado por Óscar Alonso Molina, para que desde la afortunada coyuntura de ahora, se componga una férrea urdimbre que se nutre de la quimera objetual y representativa, de la teatralidad ornamental y meticulosa, del gusto por las artes aplicadas y su naturaleza manipuladora, fijando un testigo en ascenso, clasicista, posmoderno y muy ibérico, como faceta inseparable del deseo.
ResponderEliminarEl comisario nos advierte como aperitivo que: “[...] el espectador podrá contemplar reunidas las doce piezas que componen su “Zodiaco” (1991), magnífica serie de dibujos realizada a partir del encargo de decorar el techo del Pabellón de Andalucía para la Expo del 92, en donde el artista relacionó los doce trabajos de Hércules con los signos zodiacales en un alarde creativo de referencias cruzadas entre mitos y símbolos. Junto a ella, otra serie especialmente destacable es la imaginativa lectura de “Los Viajes de Gulliver” (2005), que Villalta desarrolló a lo largo de cien ilustraciones por encargo de Círculo de Lectores a mediados de la década pasada”.
Esta sintonía con la que comienza esta nueva aproximación, catalizada a tres bandas entre artista, comisario y galerista, nos ofrece un rastro imprescindible para entender el trabajo de un virtuoso que ha hecho de todo. Su amor por el paisaje, la perspectiva, la anulación de la misma a favor de un hieratismo aspectivo, los engranajes metafísicos, la narrativa biográfica, la grata sumisión territorial, surrealista y telúrica, han provocado que “las obras seleccionadas establezcan diálogos sutiles pero firmes que subrayen la gran personalidad de este artífice y su curiosidad universal por todas las manifestaciones del espíritu humano y de la cultura en particular”.
Sin duda alguna, esta suerte de retrospectiva, nos hace la boca agua a los versados en el refinamiento imaginario y, sobre todo, a los que buscan un diálogo con cuestiones que son ajenamente propias o propiamente ajenas.
Desde el pasado 6 de mayo hasta el 7 de septiembre, la exposición “El orden de lo imaginario: una suerte de retrospectiva” de Guillermo Pérez Villalta, comisariada por Óscar Alonso Molina, puede verse en la galería Javier López & Fer Francés de Madrid.
Entra en el slideshow para que veas una muestra de lo que hay allí.
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Escuchar y mirar la obra de Pérez Villauta ha constituído una lección de Historia del arte
ResponderEliminary la vivencia, en directo de saber cómo trabaja un creador. A medida que transcurría y se mostraba la obra pensaba en De Chirico, y en la obra que muestra como preferida.
Olvídense de la anatomía para el cuerpo; la habitación inaccecible.
Aunque el tema que se repite es: "encerrar el vacío". Asocié, entonces con Heidegger y con Lacan. Me encantó el ritmo y contraritmo, que se percibe en una obra realizando las relaciones que propone. mejoré como espectadora. Ya no pensaré lo ornamental como decoratico, y muchos otros detalles.
Si nos atenemos al núcleo teórico de Heidegger, su noción de vacío se da previamente. Es ontológico. Alude al vacío con el que todos venimos al mundo. Un vacío que es choque consciente del mundo contra el Ser y que produce angustia. Cuando se conciencia que somos seres arrojados al mundo adviene el Ser-ahí, que es un poder ser, en el sentido de que está abierto a un ámbito de posibilidades de las que tiene que "hacerse cargo". A esta posibilidad del ser la denomina proyecto. O sea, que la única manera de superar el vacío consistiría en trazarse un proyecto de vida consciente, y será dentro de esta acción del Ser donde encontraríamos la opción creadora
Aunque, también, se refiere al vacío arquitectóni
El vacío otro
Con Miller, entendí la metáfora del vaso o vasija en un doble sentido, porque "la vasija es objeto creado, que viene en más al mundo (y) paradójicamente, tiene al mismo tiempo la propiedad de introducir el menos y, por lo mismo la posibilidad de llenarlo" . Por tanto, como Ser-ahí, cuyo proyecto de vida es la creación, he de crear el vacío conscientemente, un vacío capaz de llenarse.
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