lunes, 25 de abril de 2011

LA REORDENACIÓN DE LA MIRADA MODERNA-JUAN GRIS-1887-1927

Puedes apreciar la obra de Juan Gris en el "Museo Reina Sofía" ingresando a:
          www.googleartproject.com Tomada de cultural.elpais.com

    Arte poética
      Que el verso sea como una llave
      Que abra mil puertas.
      Una hoja cae; algo pasa volando;
      Cuanto miren los ojos creado sea,
      Y el alma del oyente quede temblando.
      Inventa mundos nuevos y cuida tu palabra;
      El adjetivo, cuando no da vida, mata.
      Estamos en el ciclo de los nervios.
      El músculo cuelga,
      Como recuerdo, en los museos;
      Mas no por eso tenemos menos fuerza:
      El vigor verdadero
      Reside en la cabeza.
      Por qué cantáis la rosa, ¡oh poetas!
      Hacedla florecer en el poema;
      Sólo para nosotros
      Viven todas las cosas bajo el sol.
      El Poeta es un pequeño Dios.  Vicente Huidobro, poeta chileno(1893-1948)
      Nature
      mort a la nappe a carreau(1915) Venta récord

3 comentarios:

  1. Su relación y correspondencia con el poeta chileno Vicente Huidobro,comenzada en su estadía en París, sin duda define esta arquitectura plana con la que compara a la pintura, o mejor, aplica en ella. La composición geométrica característica fundamental de su pintura, la habrá considerado una extensión de la utilización del ritmo libre, de la falta de rima de la poesía de Huidobro? Son interrelaciones que sus admiradores nos planteamos. La alteración de los signos de puntuación y de las normas de uso de mayúsculas y y minúsculas; además son recurrentes las yuxtaposiciones inusitadas en el plano semántico.Trabaja con la creación de palabras y con operaciones fonéticas, y utiliza a escritura vertical en los márgenes, cambiando la orientación visual de la lectura. Es posible que las haya redactado contemplando un cuadro de Juan Gris?

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  2. Lo que Picasso y Braque fundaron en la misma época en que él llegaba a París y empezaba a ganarse malamente la subsistencia ilustrando revistas se convirtió para Juan Gris en su residencia imaginativa y visual permanente, su ética y su estética, el centro de su vida. Después de unos pocos años fulgurantes Georges Braque eligió más o menos convertirse en decorador de interiores. A Picasso lo tentaron muy pronto los lujos y los halagos del gran mundo, y de cualquier modo su desmesura inventiva lo llevaba más hacia la expansión que hacia la persistencia o el recogimiento. Juan Gris tuvo una vida mucho más corta que Picasso o que Braque, y por lo tanto menos tiempo para cambiar o para amanerarse, pero en él había como una obstinación innata, esa forma peculiar del talento que se recrea en la concentración y se fortalece en los límites, y que suele llevar consigo una propensión al retiro gustoso y ensimismado del mundo.

    Este pintor que temió volverse invisible, que parecía destinado a una penumbra de segundón
    Renegaba de una España hostil al arte moderno; se veía a sí mismo como heredero de una cierta tradición francesa que iba de Chardin a Cézanne, y en el último año de su vida había empezado los trámites para hacerse francés. Pero en las fotos tiene una recia cara española, una masculinidad seria casi con tosquedades antillanas, y en su pintura, más allá del cubismo, está esa sencillez más evangélica que ascética de los bodegones de Sánchez Cotán, las mesas con vasos y platos de barro y manjares populares rotundos del joven Velázquez.

    A algunos pintores muy entregados a la materialidad del oficio les gusta fingir que no se saben explicar por escrito o que no están familiarizados con la literatura. Juan Gris leía muy cuidadosamente a sus contemporáneos franceses, y a través sobre todo de su amistad con Vicente Huidobro conocía muy bien la literatura moderna que se escribía en español. Ya muy enfermo, uno de sus últimos trabajos gráficos fue una ilustración bellísima para la portada del número que la revista Litoral dedicó a Góngora. En una carta a Vicente Huidobro, escrita en aquel español contaminado de francés que se le fue agravando con los años, le hace una observación sobre unos poemas que Huidobro le había mandado que es tan valiosa para la literatura como para la pintura: “Cuanto más una imagen está basada en algo corriente o vulgar más fuerza y más poesía ella tiene”.

    Juan Gris murió con cuarenta años, en 1927, con la melancolía de que su nombre no fuera conocido en España y de que incluso en París su estética se hubiera quedado rápidamente atrás, relegada al anacronismo por las fugacidades de la moda, que entonces imponía la ortodoxia surrealista. En otra carta expresa el estupor de quien nota que se queda al margen de su propio tiempo: “A la gente le encantan los despliegues de caos, pero a nadie le gusta la disciplina y la claridad”.

    Ahora esa mujer de vestido rojo pintada por Juan Gris está en los paneles publicitarios de las calles, y uno de los placeres de este otoño en Madrid es seguir el rastro de este pintor que temió volverse invisible, que parecía destinado a una penumbra de segundón, el que viene detrás de los que más brillan, el underdog, por usar la sórdida palabra americana. Quién va a fijarse en Juan Gris existiendo Picasso, existiendo Braque. Pero en él hay algo que los otros dos no tienen: “La pureza de corazón de desear una sola cosa”, dice Kierkegaard, la capacidad de roturar un espacio limitado del mundo y quedarse en él, no excluyendo hurañamente todo lo demás, sino conteniéndolo todo, comprimiéndolo, a la manera de Giorgio Morandi, de Thelonious Monk, de Torres García o de Emily Dickinson.cultura.elpais.com

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    ARTE
    Juan Gris bate su propio récord
    EFE / LONDRES
    Día 05/02/2014 - 10.25h
    La obra «Nature morte à la nappe à correaux» se vende por 41,4 millones de euros en Londres
    Juan Gris bate su propio récord
    AFP
    La obra de Juan Gris «Nature mort a la nappe a carreaux» (1915) se vendió por 41,4 millones de euros
    La obra del español Juan Gris «Nature morte à la nappe à correaux» se vendió hoy en la sala londinense Christie's por el precio récord para un trabajo del artista de 34,8 millones de libras (41,4 millones de euros).

    El óleo que el madrileño pintó en 1915 partía con un precio estimado de 18 millones de libras (21,4 millones de euros), pero superó finalmente la barrera de 20,3 millones de euros que marcó en 2010 en Nueva York la obra «Violon et guitare», la más cara hasta ahora de Gris.

    El español pintó esta naturaleza muerta de tamaño medio (1,16 metros de altura por 89,3 centímetros de anchura) en un momento de profunda creatividad en el que su estilo registró cambios significativos.

    A lo largo del último siglo, «Nature morte à la nappe à correaux» ha formado parte de algunas de las exposiciones más importantes dedicadas al cubismo en todo el mundo.

    Picasso no cumplió las expectativas
    En la misma subasta de arte impresionista en Londres, el trabajo del también español Pablo Picasso «Femme au costume turc dans un fauteuil» se remató por 16,8 millones de libras (19,9 millones de euros).

    La obra, que retrata a la musa y segunda mujer de Picasso, Jacqueline Roque, se perfilaba como la estrella de la noche en Christie's, al partir con un precio estimado de hasta 20 millones de libras (23,8 millones de euros), que finalmente no alcanzó.

    El retrato forma parte de un pequeño grupo de pinturas que muestran a Roque vestida de odalisca, una asistente de las concubinas y esposas del sultán en el imperio otomano.

    La obra del holandés Piet Mondrian«Composition No II with Blue and Yellow» se vendió por su parte por 12,4 millones de libras (14,7 millones de euros), mientras que «Les cylindres colorés», del francés Fernand Léger, alcanzó los 12 millones de libras (14,28 millones de euros).

    Christie's tenía previsto vender también hoy, en una subasta dedicada al surrealismo, 27 obras del español Joan Miró, pertenecientes a un grupo de 85 trabajos del pintor propiedad del Estado portugués, si bien finalmente esos trabajos se retiraron de la subasta.

    La sala londinense argumentó que había demasiadas "incertidumbres" legales alrededor de esas obras, a pesar de que un tribunal luso había dado luz verde esta mañana a su venta.

    El cuadro del belga René Magritte «Les chasseurs au bord de la nuit (The hunters at the edge of night)» se erigió en la estrella de esa subasta de arte surrealista al alcanzar los 6,5 millones de libras (7,7 millones de euros).www.abc.es

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