martes, 19 de agosto de 2014

IX BIENAL DE TAIPEI: EL ARTE IMAGINA COMO SERÁ EL PLANETA DESPUÉS DEL CAMBIO

IX BIENAL DE TAIPEI: EL ARTE IMAGINA COMO SERA EL PLANETA DESPUES DEL CAMBIO

Nicolas Bourriaud, curador de la Bienal de Taipei.
Nicolas Bourriaud, curador de la Bienal de Taipei.
La IX Bienal de Taipei, que se llevará a cabo desde el 13 de septiembre hasta el 4 de enero de 2015, tendrá como curador al crítico, escritor y director de laEscuela de Bellas Artes (ENSBA) de París, Nicolas Bourriaud, quien bajo la consigna “La
Gran aceleración” orientará la muestra en torno de las relaciones entre el  arte contemporáneo y elecosistema en el que se desarrolla.
Con una perspectiva que hacía falta, la propuesta de Bourriaud enfrenta los dominios antagónicos del hombre, su capacidad para crear y para destruir, y, difícilmente, su idea habría encontrado un contexto más apropiado en un mundo castigado por la contaminación, la depredación, inundaciones, sequías y fríos extremos.
“La actividad humana ha ido transformando el planeta durante miles de años. Todos los ecosistemas están marcados por la presencia humana, pero el grado y la velocidad del cambio en los últimos 60 años, es lo que los científicos denominanLa gran aceleración”, precisó Bourriaud, al presentar en diciembre pasado su proyecto curatorial.
“Esto también hizo que los científicos llamaran Antropoceno a esta nueva era geológica, marcada por el fuerte impacto de las actividades humanas sobre la evolución atmosférica y geológica del planeta”, indicó en su texto “La gran aceleración –Arte en el Antropoceno”.
Según Bourriaud, la bienal utilizará esa imagen para analizar cómo define y representa el arte contemporáneo el espacio-tiempo y cómo se imaginan los artistas el planeta con nuevas formas de relaciones y nuevos estados de la materia. La muestra servirá, además, para destacar la forma en que los artistas se enfocan en los enlaces, los encadenamientos, las conexiones y las mutaciones.
La bienal tendrá lugar en las instalaciones del Museo de Bellas Artes de Taipei donde, desde 1998, los organizadores han trabajado para darle carácter internacional, invitando artistas, curadores e investigadores con el objeto de construir un espacio de intercambio de prácticas culturales y artísticas.
Bourriaud, nació en Francia en 1965 y entre otras funciones, fue curador de Arte Contemporáneo en la Tate Britain deLondres, asesor de la Fundación Victor Pinchuk, en Kiev, y dirigió el Departamento de Estudios del Ministerio de Cultura de Francia. Además, fundó y codirigió el Palais de Tokyo de  París y organizó numerosas bienales.
En 1998, con su libro “Estética relacional”, en el que analizó los nuevos enfoques del arte contemporáneo en la década de los 90 e indagó en una estética de la interacción humana, de encuentros y de la evolución de los contextos sociales, Bourriaud logró un gran reconocimiento entre sus colegas.
www.artezineblog.wordpress.com

4 comentarios:


  1. Por Yago Franco
    yagofranco@elpsicoanalitico.com.ar

    Verano de 1930, Semmering, Alpes austríacos. Durante la tarde, paseando por los jardines de su residencia veraniega, con una palidez resaltada por las luces del atardecer, un fastidioso Sigmund Freud - a causa de las molestias que le ocasiona la mandíbula mecánica que utiliza a raíz de su enfermedad, y también por sus 70 años y sus pérdidas - le dice espontáneamente a George Sylvester Viereck: “La muerte es la pareja natural del amor. Juntos gobiernan el mundo. Ese es el mensaje que transmite mi libro Más allá del principio del placer. En sus orígenes el psicoanálisis asumía que el amor era lo más importante. En la actualidad sabemos que la muerte es igualmente importante”. [1]
    Esto dice Freud, que unos años antes de Más allá… , en el final de El Yo y el Ello en 1923, había sostenido que temía haber subestimado el papel de Eros al ocuparse de Thánatos. Eros, que para él es a lo que la humanidad debe apostar para evitar su aniquilación, según le escribirá a Einstein en 1932. Se trata de no subestimar a ninguna de las dos pulsiones.

    Eros y Thánatos: abrazados en una danza que necesita de ambos. Uno crea, el otro destruye. Se necesitan uno al otro: uno para crear sobre lo que el otro destruye, para reunir lo que está fragmentado y crear unidades más grandes y complejas, e inversamente, su oponente para destruir necesita que Eros cree, y disgregando, destruyendo, lo obliga a Eros a seguir reuniendo y creando. Tal vez Thánatos ignore que su victoria lo lleva a su desaparición. Que es una suerte de victoria pírrica. Nunca se enterará. Eros, tozudamente, crea sobre la destrucción, o, inicialmente, sobre el caos originario del ser, fabricando puentes, pasadizos, laberintos que harán equilibrio sobre el abismo.

    Si Thánatos tiende a ignorar la alteridad, o a aniquilarla, y no necesita del otro para llevar a cabo su cometido, Eros, en cambio, no es sin el otro. En realidad: es el otro el que le da vida y es el otro el que señala los caminos mediante las limitaciones y desvíos a las que lo somete, apelando a la represión originaria, y alentando la sublimación. Estimulaciones y limitaciones retomadas creativamente por cada sujeto.

    Decíamos que no bailan solos. Eros necesita de cierta dosis de Thánatos: para destruir y separarse de aquello que daña al Yo y hacer prevalecer el principio del placer. Utiliza a la pulsión de destrucción también en el duelo, o para instaurar diferencias con oponentes (reconocidos como otros); y también en el baile erótico que tiene lugar bajo las sábanas. Hace quince mil años en la caverna de Lascaux, alguien plasmó a Eros y a Thánatos abrazados, en la pintura del hombre con cabeza de pájaro y el pene erecto, mientras cae, tras haber abierto el vientre de un bisonte. Como si estuviera describiendo esa pintura rupestre, descubierta algunos años después, esa tarde de verano en Los Alpes Freud continúa diciéndole a su interlocutor: “Toda vida combina el deseo de supervivencia con un ambivalente deseo de aniquilación (…) El deseo de muerte y el de vida moran uno junto al otro en nuestro interior”. [2]

    La desmezcla es otra cosa: Thánatos se libera de Eros. La pulsión de muerte ve así allanado su camino. Eros ya no consigue retenerla y ponerla a su servicio: o, tal vez, ceda a ese vital deseo de aniquilación – casi un oxímoron -.
    www.elpsicoanalitico.com.ar

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  2. (...)Esto seguramente no es comprensible sin una explicación. Yo creo lo siguiente: desde tiempos inmemoriales se desarrolla en la Humanidad el proceso de la evolución cultural. (Yo sé que otros prefieren denominarlo: “civilización”). A este proceso debemos lo mejor que hemos alcanzado, y también buena parte de lo que ocasiona nuestros sufrimientos. Sus causas y sus orígenes son inciertos; su solución, dudosa; algunos de sus rasgos, fácilmente apreciables. Quizá lleve a la desaparición de la especie humana, pues inhibe la función sexual en más de un sentido, y ya hoy las razas incultas y las capas atrasadas de la población se reproducen más rápidamente que las de cultura elevada. Quizá este proceso sea comparable a la domesticación de ciertas especies animales. Sin duda trae consigo modificaciones orgánicas, pero aún no podemos familiarizarnos con la idea de que esta evolución cultural sea un proceso orgánico. Las modificaciones psíquicas que acompañan la evolución cultural son notables e inequívocas. Consisten en un progresivo desplazamiento de los fines instintivos y en una creciente limitación de las tendencias instintivas. Sensaciones que eran placenteras para nuestros antepasados son indiferentes o aun desagradables para nosotros; el hecho de que nuestras exigencias ideales éticas y estéticas se hayan modificado tiene un fundamento orgánico. Entre los caracteres psicológicos de la cultura, dos parecen ser los más importantes: el fortalecimiento del intelecto, que comienza a dominar la vida instintiva, y la interiorización de las tendencias agresivas, con todas sus consecuencias ventajosas y peligrosas. Ahora bien: las actitudes psíquicas que nos han sido impuestas por el proceso de la cultura son negadas por la guerra en la más violenta forma y por eso nos alzamos contra la guerra: simplemente, no la soportamos más, y no se trata aquí de una aversión intelectual y afectiva, sino que en nosotros, los pacifistas, se agita una intolerancia constitucional, por así decirlo, una idiosincrasia magnificada al máximo. Y parecería que el rebajamiento estético implícito en la guerra contribuye a nuestra rebelión en grado no menor que sus crueldades.

    ¿Cuánto deberemos esperar hasta que también los demás se tornen pacifistas? Es difícil decirlo, pero quizá no sea una esperanza utópica la de que la influencia de estos dos factores –la actitud cultural y el fundado temor a las consecuencias de la guerra futura– pongan fin a los conflictos bélicos en el curso de un plazo limitado. Nos es imposible adivinar a través de qué caminos o rodeos se logrará este fin. Por ahora solo podemos decirnos: todo lo que impulse la evolución cultural obra contra la guerra.

    Lo saludo cordialmente y le ruego me perdone si mi exposición lo ha defraudado. Suyo. Sigmund Freud”.
    www.carpetahistoria.fahce.unlp.edu.ar
    Es la última parte de la carta de Freud a Einstein en respuesta a la suya. Es de 1932. Aconsejo su lectura en este sitio.

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  3. Es decir, se trata de la aceleración que experimentan los cuerpos en movimiento dentro de un sistema de rotación y que significa que aquellos “huirán” del centro.
    Y todo ello sin olvidar tampoco a lo que se conoce como aceleración de Coriolis o efecto Coriolis. El científico francés que le da nombre, Gaspard-Gustave Coriolis, fue quien en el año 1836 describió aquella que no es más que la aceleración relativa de un cuerpo en movimiento dentro de lo que es un sistema de referencia de rotación.
    La aceleración puede tener diferentes direcciones. Cuando el cuerpo está disminuyendo su velocidad, su aceleración se dirige en sentido contrario a su movimiento. En cambio, cuando un cuerpo está aumentado su velocidad (es decir, está acelerando), la aceleración mantiene el mismo sentido que la velocidad.


    Lee todo en: Definición de aceleración - Qué es, Significado y Concepto http://definicion.de/aceleracion/#ixzz3AxN1FBKB

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  4. Crece el número de delitos que tienen como víctimas a los adultos mayores En la región hubo más de una decena de casos sólo en lo que va de agosto. Ya son 41 los jubilados muertos en asaltos en todo el país en 2014 Fueron quince minutos, quizás veinte. Pero se les antojaron una eternidad. Después la vida nunca volvió a ser la misma. Irene Castrogiovani (59) cuenta que el hecho que marcó un antes y un después en su vida se desató un día en que su papá, de 91 años, fue sorprendido por ladrones en el pasillo de la casa que ambos comparten en el centro de La Plata cuando estaba con un familiar. Los asaltantes llevaban armas largas, los obligaron a entrar, los amenazaron, los golpearon y les robaron. Con la partida de los delincuentes no terminó el drama: a Irene, al poco tiempo, se le desató un problema de tiroides como consecuencia del estrés prost traumático. Su papá Vicente desarrolló una suerte de “mecanismo de defensa”, dice Irene. Y toma más precauciones que nunca para evitar volver a vivir un episodio semejante. La preocupación de Vicente y de Irene se da en el marco de un fenómeno que preocupa cada vez más: el incremento de los delitos que tienen como víctimas a los adultos mayores. Sólo en lo que va de agosto, en la Región se registraron más de una decena de hechos delictivos en los que se vieron afectados mayores de 60 años. Y, en lo que va del año, 41 jubilados murieron en todo el país en el marco de asaltos cada vez más violentos. Estos delitos no se caracterizan sólo por ser más cruentos, sino también por cambiar y perfeccionarse. Así, en ámbitos judiciales se indica que la mayoría de quienes los perpetran son jóvenes de entre 19 y 23 años que hacen precarios trabajos de inteligencia previa y que muchas veces actúan en los mismos barrios donde viven (ver aparte). También aparecen nuevas formas de los clásicos “cuentos del tío” y en los últimos tiempos un número creciente de personas de la tercera y la cuarta edad fueron víctimas de secuestros viruales (ver aparte). En la lista de casos ocurridos en la Región recientemente destacan los fatales. El último ocurrió en Villanueva, cerca de Ranchos, donde Mirta Oraña (65) apareció muerta, atada de pies y manos y amordazada en la casa donde vivía sola. La casa estaba en un completo desorden y la principal hipótesis que se maneja es que murió en el marco de un robo. A principios de año, en el mes de marzo, otro robo dejaba el saldo de un adulto mayor muerto cuando Anselmo Gómez de Saravia fue asesinado en su casa de 2 y 68, apuñalado delante de su mujer y su nieta. Según los investigadores Gómez de Saravia se resistió al robo y recibió dos puñaladas en el abdómen. Murió tras un dia de agonía. Otros casos, que no tienen un saldo trágico, no dejan de dejar secuelas, algunas tan serias como afecciones que necesitan ser tratadas por psiquiatras o la aparición de patologías que permanecían latentes. Así lo indica Osvaldo Tirante, gerontólogo y miembro fundador de la Asociación de Geriatría y Gerontología del Gran La Plata. CONSECUENCIAS “Un robo violento siempre tiene consecuencias en las personas mayores. Por un lado, en su cotidianeidad, porque el abuelo que sufrió un asalto cambia drásticamente sus costumbres. Empieza a desconfiar y a tomar otro tipo de precauciones, como no salir solos de casa o controlar mucho con quién habla y de qué temas habla. Pero también puede haber consecuencias físicas y emocionales, algunas de las cuales pueden requeriri un tratamiento específico”, dice Tirante. Entre las consecuencias emocionales, Tirante menciona a la posible aparición de fobias, miedos recurrentes o estados de depresión. Con todo, el grado de afección va a depender del tipo de episodio y de la personalidad de cada persona. “Algunos lo toman con mayor filosofía, otros no pueden salir solos y necesitan ayuda psicológica o psiquiátrica”, dice el experto.

    Leer más en http://www.eldia.com.ar/edis/20140824/Crece-numero-delitos-tienen-como-victimas-adultos-mayores-informaciongeneral0.htm

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