Lo que los mosaicos romanos revelan sobre el arte antiguo Mosaico de Bailarines Báquicos, Hatay, Turquía. Tiempo estimado de lectura: 6 minutos • Última actualización: 02.20.19 Los mosaicos romanos se componen de imágenes geométricas y de figuras creadas por arreglos de pequeñas piezas de piedra y vidrio. Las formas más tempranas de mosaicos grecorromanos fueron concebidas en Grecia a fines del siglo V aC Aunque los griegos refinaron el arte de los mosaicos figurativos incrustando guijarros en el mortero, los romanos ampliaron esta técnica establecida, usando teselas, cubos de piedra, cerámica, o vidrio: para formar diseños intrincados y coloridos. Hoy en día, estas obras ofrecen una imagen vívida de la antigua vida romana; un vistazo a las actividades cotidianas de una antigua civilización que incluyó concursos de gladiadores, deportes y agricultura, al mismo tiempo que sirve como documentación de artículos cotidianos com...
Malba vuelve a presentar la exposición Grete Stern. Los sueños 1948 - 1951, con la colección completa de 46 fotomontajes vintage de la serie "Sueños" que Grete Stern publicó entre 1948 y 1951 en la página "El psicoanálisis le ayudará" de la revista Idilio (Editorial Abril), una producción clave de la vanguardia fotográfica en la Argentina. Las piezas que se exhiben integran la colección privada de Eduardo F. Costantini y constituyen uno de los cinco juegos firmados por la artista que existen en el mundo.
ResponderEliminarLos fotomontajes surgían del análisis de los sueños que las propias lectoras enviaban a la redacción, interpretados por el sociólogo Gino Germani -director de Idilio-, que firmaba sus notas con el seudónimo de Richard Rest. La colaboración duró alrededor de tres años y se publicaron cerca de 150 trabajos. Durante el primer año, Grete Stern fotografió casi todos los fotomontajes antes de entregarlos. Luego, prácticamente abandonó esa rutina. Es por eso que hoy sólo se conservan 46 negativos.
Los protagonistas de las fotos eran sus amigos, familiares y vecinos, y las imágenes complementarias -paisajes, fondos, objetos, personajes secundarios- fueron tomadas de su propio archivo. "Como debía entregar un fotomontaje por semana, el trabajo era intenso. Esta exigencia le dejaba poco tiempo para corregir o retocar las piezas, y explica que ella modificara por lo menos cuatro fotomontajes después de publicados", relata Luis Priamo. En consecuencia, hoy existen dos versiones de cada uno de esos sueños: el de Idilio y el del archivo de la autora.
A pesar de publicarse semanalmente durante casi tres años, los fotomontajes fueron completamente ignorados, en gran parte por el desprestigio intelectual de este tipo de revistas. La serie se presentó por primera vez en la Facultad de Psicología de la Universidad de La Plata, a mediados de los años 50. La primera muestra en Buenos Aires se realizó en 1967, en colaboración con la poeta Elva de Lóizaga. En 1982, fueron exhibidos en la gran muestra de FotoFest, de Houston, Estados Unidos. A partir de entonces, el prestigio de la serie creció rápidamente y fue objeto de numerosas exposiciones. Algunas de ellas en el país; otras, en el IVAM de Valencia (1995), en Francia y en España (1996), en Portugal y en Holanda (1997) y en Alemania (1998/ 1999). Actualmente, la serie "Sueños" es reconocida en su original y verdadera dimensión.
Grete Stern www.malba.org.ar
“Para ella fue una impresión muy grande cuando en el ‘60 va por un año, contratada por la Universidad Nacional del Nordeste a enseñar fotografía y en Resistencia descubre grupos de aborígenes”, relata Silvia Cóppola. “Fue una revelación comprender que ellos eran los genuinos habitantes del país. Se les acercó, los fotografió lejos de toda intención turística, con todo respeto. Se interesó por su cultura, su artesanía. Los retratos de mujeres indígenas están hechos con la misma dedicación con que hacía los de intelectuales y artistas. Pidió una beca, que se le otorgó 4 años después, y en trenes, colectivos, carros atravesó Chaco, Formosa, Salta haciendo 800 fotos, parte de las cuales, al no tener el apoyo del Fondo, expuso en distintos lugares del país, acompañadas de una conferencia sobre la experiencia vivida al tomarlas.”
ResponderEliminar“Durante 40 años, los Sueños no fueron valorados. Peor aún, los menospreciaron, la editorial destruyó los originales y sólo quedaron los recortes de la revista. Mi mamá hizo una exposición en el ‘67, para la que escribió un texto.” Apuntes sobre fotometraje es su título y allí Grete Stern dice: “La foto es el medio con el que me expreso y que requiere, como afirma Julio Cortázar en Las babas del diablo, disciplina, educación estética y dedos seguros”. En esos apuntes, la artista, además de dar detalles técnicos, cita a los movimientos surrealista y dadá, a George Grosz y a Man Ray.
Los Sueños se exhibieron como parte de una gran retrospectiva en la Fundación San Telmo, en l981, pero, puntualiza Silvia Cóppola, “cuando vino la gente de Foto Fest, de los Estados Unidos, en el ‘92 y se los llevaron a Houston, ahí empezó el gran interés internacional. Aquí, en verdad, sólo habían advertido su valor dos importantes coleccionistas de arte, Marion y Jorge Helf. Hay entendidos de España que consideran que conforman la parte más importante de la obra de mi madre. Es en los 90 que empieza, retrospectivamente, todo el análisis de esa mirada tan crítica, tan aguda que ella tenía sobre las mujeres de sectores populares y medios, sobre sus fantasías y su dependencia. En Idilio trabajaba gente del ámbito intelectual que había sido desplazada de la Universidad, pero usaban seudónimo. Luisa Mercedes Levinson, por ejemplo, era Lisa Lenson. Y Gino Germani, el fundador de la sociología local, que comentaba en esa etapa los Sueños, firmaba Richard Rest. Mi madre era de las pocas personas de la revista que no usaban seudónimo: firmaba Grete Stern porque no tenía ningún complejo, respetaba su trabajo. En el curso del tiempo, ella modificó algunos fotomontajes, les cambió el título. Mi madre siempre pensó que había reflejado la situación de la mujer desde su propio punto de vista, el de una persona que venía de la vanguardia europea, con otra mentalidad”.
Moira Soto en www.pagina12.com.ar Silvia Cóppola es, su hija.