MUSEO DEL ARTE/ HENRI MATISSE, GUSTAV KLIMT, JOAN MIRÓ
Museo del Arte
|
|
Posted: 26 Feb 2013 03:14 AM PST
 Henri Matisse
La danza es una alternativa lírica a la fragmentación cubista de Picasso y a la visión trágica del expresionismo alemán. La gran novedad de esta famosa obra reside en el dinamismo de los cuerpos, de los que se libera una fortísima tensión vital y cromática. Las figuras se alargan en el ritmo cósmico que las transforma: un ideal de belleza construido a partir de una síntesis absoluta de música, poesía y pintura.
La pintura representa simbólicamente un abrazo universal en el que la vida se interpreta como armonía cíclica que rítmicamente se repite a sí misma, una visión en la que todas las figuras participan y expresan esa alegría de vivir que es fundamental en el arte de Matisse. El motivo del corro danzante aparece por vez primera en La alegría de vivir, pero aquí Matisse simplifica la composición eliminando una figura y adaptando la composición a la forma rectangular del cuadro para alcanzar una armonía formal que roza la abstracción.
La obra fue, junto a La música, un encargo del coleccionista ruso Sergei Sukin para la decoración de su residencia de Moscú. Hay que recordar la relación que une a Matisse con Rusia: en 1908 el artista envía a Moscú algunos cuadros para la exposición del Toisón d'Or.
|
|
Posted: 26 Feb 2013 03:11 AM PST
-Gustav%20Klimt.jpg?psid=1) Gustav Klimt
La mujer, de tres cuartos, avanza hacia la izquierda sujetando por la melena la cabeza decapitada de Holofernes. La escena, de gran crueldad, está proyectada en una dimensión estética dominada por el oro, a la que sirven de contrapunto los elementos geométricos del vestido y del fondo, que asumen un valor decorativo. La composición tiene ecos simbolistas, decadentes que, en esa unión de eros y thanatos (amor y muerte), exaltan una figura femenina con connotaciones demoniacas y, al mismo tiempo, conturbadoras.
|
|
Posted: 26 Feb 2013 03:05 AM PST
Fundación Joan Miró, Barcelona
Joan Miró Este lienzo representa la síntesis de la pintura practicada por Miró durante la década de 1960. De una parte, el amarillo deslumbrante del fondo y la mancha intensa de color azul; de otra, los trazos gestuales, y todo ello conjuntado por los finos grafismos de su repertorio. |
Bajo el título "El jardín de las maravillas", hasta el 5 de noviembre se podrán ver en el Museo de Bellas Artes de Paraná un conjunto de 56 obras de Joan Miró ofrecidas en conmemoración por el 120º aniversario del nacimiento del pintor, escultor y grabador español.
ResponderEliminarIMPRIMIRACCESIBLEACCESIBLE
ampliar
Se trata de una serie de aguafuertes, litografías y xilografías producidas durante el período 1950-1980 que ya recorrieron las provincias de Córdoba, Mendoza y Tucumán, y que antes de regresar a Europa recalarán en Buenos Aires.
La muestra, que se exhibe con entrada libre y gratuita, cuenta con el auspicio de la Embajada de España y el respaldo de la Sucesión Miró.
Nacido el 20 de abril de 1893 en Barcelona, Miró estudió en la Escuela de la Lonja y en la Escuela de Francesc Galí de su ciudad natal. Fue pintor, escultor, grabador y ceramista. Realizó su primera muestra individual en la Galería Dalmau, en 1918, época en que tomó contacto con los artistas de la vanguardia.
En un principio, su obra mostró fuertes influencias cubistas y expresionistas hasta que se instaló en París en 1920 y comenzó una amistad con Pablo Picasso: su trabajo se volvió más onírico.
Miró está considerado uno de los máximos representantes del surrealismo. Murió en Palma de Mallorca el 25 de diciembre de 1983.
Uno de los grandes proyectos del artista fue la creación en 1975 de la Fundación Joan Miró, ubicada en Barcelona, centro cultural y artístico para difundir las nuevas tendencia del arte contemporáneo.
"El jardín de las maravillas" se puede visitar en forma gratuita de 8 a 13 y de 15 a 22 de lunes a viernes, mientras que los fines de semana permanecerá abierta en horario corrido, de 10 a 22. www.telam.com.ar
Gustav Klimt en Viena
ResponderEliminarMuchas de las obras de Klimt, especialmente de sus inicios, están en exhibición permanente en Viena: en la Secesión, el Burgtheater, el Kunsthistorisches Museum o el MAK.
Secesión
Secesión
Cuadro de Gustav Klimt: Bethovenfries
Friso de Beethoven, 1902 (Secesión)
Gustav Klimt en el Kunsthistorisches Museum
Kunsthistorisches Museum
El Burgtheater
Burgtheater
Servicio de Té de Josef Hoffmann, Wiener Werkstätte, 1903
Juego de tazas de té, Wiener Werkstätte (Taller de Viena), 1903 (MAK)
Museo de las Artes Aplicadas
MAK
Secesión
La Secesión de Viena, de la que Klimt fue cofundador, no es solo una de las principales atracciones turísticas de Viena. En su interior pueden contemplar los admiradores de Klimt el mundialmente famoso Friso de Beethoven. Se trata de un ciclo de pinturas expuestas en 1902 (de 34 x 2 metros, que recorren tres paredes), dedicado al compositor Ludwig van Beethoven.
Kunsthistorisches Museum (Museo de Historia del Arte)
Para los amantes de la obra de Klimt resulta interesante la escalera del Kunsthistorisches Museum, porque en ella se pueden admirar 40 pinturas en las pechinas e intercolumnios, que decoran los estrechos espacios de pared que quedan entre los arcos y las columnas. Once de estas pinturas son obra de Gustav Klimt, las otras son de su hermano Ernst y de Franz Matsch. Representan la historia del arte y de las artes decorativas desde sus comienzos en el antiguo Egipto hasta los tiempos modernos.
Burgtheater
Los valiosos esbozos de los dibujos para decorar los techos de la escalera principal del Burgtheater realizados por Gustav Klimt fueron encontrados a finales del año 1990 en los desvanes del teatro. Estos bocetos de incalculable valor, entre los que se encuentra el único autorretrato de Klimt, pudieron salvarse de la destrucción. Los cartones están ahora expuestos al público en el "Klimt-Raum", un espacio aparte dedicado al pintor. En las visitas guiadas pueden contemplarse (junto con los decorados de los techos de la escalera).
Museo Austríaco de Artes Aplicadas/ Arte Contemporáneo - MAK
Gustav Klimt trabajó junto con Josef Hoffmann en el Palacio Stoclet de Bruselas. Entre 1905 y 1909 Klimt esbozó el Friso Stoclet. Los nueve dibujos de trabajo que hizo para este friso están expuestos hoy en el MAK en Viena. Este museo posee además el legado de la famosa Wiener Werkstätte (Taller de Viena) que comprende dibujos esbozados, libros de modelos, álbumes de fotos, muestras de tejido originales, bordados, y además todos los archivos de la empresa.
Además, en el Belvedere Superior, en el Museo de Viena y en el Museo Leopold se exponen de forma permanente algunas obras de importancia de Gustav Klimt.www.wien.info.es
Estilo de Matisse
ResponderEliminarLa obra de Henri Matisse contenía temas comunes, como rostros humanos y figuras, pero en lugar de utilizar los tonos de piel y colores realistas, que eran fieles a la realidad, utilizó vivos colores poco comunes que sugieren sentimientos e ideas de lo que el rostro era.
Esculturas de Matisse
Aunque Matisse era ante todo un pintor, también era conocido por sus dibujos, esculturas y obra gráfica. Más tarde en la vida de Henri Matisse, se enfermó y estaba postrado en la cama y ya no podía pintar. En su lugar, comenzó a crear collages con papel de colores vibrantes que se cortan en formas caprichosas, conocidos como sus recortes. Incluso sin pintura y lienzo, su obra tenía los rasgos distintivos fauvistas de ser inmensamente colorida y gestual.
Legado de Matisse
La exploración de la pureza del color y el deseo de simplificar el arte de Henri Matisse para que sea sólo el color y la forma, puede decirse que es donde el arte moderno comenzó. Él dijo: "El color no se nos ha dado para que nosotros debamos imitar la naturaleza, sino para que podamos expresar nuestras propias emociones." Este fue un concepto revolucionario, que se convertiría en un importante concepto en el arte del siglo XX. Influyó el movimiento temprano del expresionismo con artistas como Pollock y Willem de Kooning que sentían que el arte debía venir desde dentro de la artista, ser muy personal y lleno de movimiento y de vida.www.elhowenespanol.com
ResponderEliminarObra de Joan Miró. Pinturas
El oro del azur, 1967
Acrílico sobre tela
205 x 173 cm
Fundació Joan Miró
Esta obra plasma la vigencia que para Miró tenían todavía los signos y símbolos de los años cuarenta como expresión de su concepción poética de la pintura. Estrellas, planetas, las configuraciones elementales de los personajes ineludibles (la mujer y el hombre, el principio femenino y el principio masculino) y, por encima de ellos, una línea ondulante, probablemente un pájaro que reinventa el horizonte, contribuyen a la definición espacial y ofrecen una nueva versión de la cosmología mironiana.
fundaciomiro-bcn.org