La mayoría de las representaciones de avestruces muestran al macho en actitud de cortejo: el cuello erguido, las patas flexionadas y las alas bajas y semiabiertas. La línea serpenteante que sale del pico representaría el sonido que emite el macho en celo y la cruz que muchas veces aparece en el interior del cuerpo, la partición del universo en los puntos cardinales. Gran parte de las imágenes desarrolladas por esta cultura llegan hoy a nosotros integradas al diseño de objetos de la vida cotidiana, tales como piezas de cerámica, elementos textiles, indumentaria, etcétera. La principal temática de las imágenes está relacionada con la naturaleza, especialmente el mundo animal. En ellas se combina la estilización de las formas naturales con elementos geométricos. Generalmente estas formas encierran diferentes significaciones vinculadas a la religión y las creencias. Lamentablemente, en nuestro país se han perdido o destruido los códices que permitirían su desciframiento, ya que los conqu...
Para el Proyecto del Genoma Artístico, Matthew Israel, de 34 años, quien tiene un doctorado en arte y arqueología del Instituto de Bellas Artes de la Universidad de Nueva York, encabeza a un equipo de una docena de historiadores de arte que deciden cuáles son esos códigos y cómo deberían aplicarse.
ResponderEliminarAlgunas etiquetas (Art.sy les llama “genes” y reconoce unos 800 de ellos, y más se suman diariamente) denotan cualidades bastante objetivas, como el periodo histórico y la región de donde procede la obra y si es figurativa o abstracta, o pertenece a una categoría establecida como cubismo, retrato flamenco o fotografía.
Conforme se aplican las categorías, a cada una se le asigna un valor entre 1 y 100: Un Andy Warhol podría calificar algo en la escala de arte pop, mientras que un post-Warholiano se clasificaría diferente, dependiendo de las influencias.
El software puede ayudar a filtrar las imágenes en base a cualidades visuales básicas como el color, pero el alma del juicio es humana.
“Literalmente, una persona lo hace a mano, e introduce un número para todos los campos relevantes”, dijo Israel.
La complejidad técnica es superada por los desafíos de curación.
“Aprendimos que los datos importan mucho más que las matemáticas”, dijo Daniel Doubrovkine, de 35 años de edad, quien está a cargo de la ingeniería en Art.sy. “¿Cómo se va a seleccionar algo que muestra 'calidez’ con una máquina? No lo hacemos”.
De manera similar, Pandora tiene una sala llena de musicólogos que desglosan cada melodía; su análisis luego es convertido en algoritmo, llamado Proyecto del Genoma Musical, que recomienda canciones en su reproductor basado en el gusto de los usuarios y las calificaciones que dan a cada pista. (Joe Kennedy, el director ejecutivo de Pandora, fungió como consultor de Art.sy.)
Pero Art.sy pretende hacer conexiones entre obras de arte que son aparentemente de mundos diferentes, con un catálogo que comprende piezas del Museo Británico, la Galería Nacional en Washington, el Museo de Arte Contemporáneo de Los Ángeles y otros. Un socio reciente, el Museo Nacional de Diseño Cooper-Hewitt en Manhattan, subsidiaria del Smithsoniano, ha añadido objetos a la mezcla, lo cual será una prueba para la tecnología del sitio y los paralelos que traza, dijo Seb Chan, el director de medios digitales y emergentes del Cooper-Hewitt.
Culturalmente, “¿qué significa recomendar una pintura a partir de ver una cuchara del siglo VII, por ejemplo?”, dijo. Anticipando esas preguntas, el personal de Art.sy tiene un blog que explica cómo funciona su proceso.
El director ejecutivo y fundador, Carter Cleveland, de 25 años de edad, soñó con Art.sy cuando era alumno de último año en la Universidad de Princeton y no podía encontrar una pieza de arte agradable para decorar su dormitorio. Ayudado por su familia – su padre es redactor de arte; su madre, financista) – después de su graduación eventualmente atrajo a socios como el galerista Larry Gagosian y patrocinadores como el personaje del mundo del arte Dasha Zhukova y Wendi Murdoch, la esposa de Rupert Murdoch, que ha estado ansiosa de presentarle gente.
Eric Schmidt de Google y Jack Dorsey de Twitter también son inversionistas, y John Elderfield, el ex curador en jefe de pintura y escultura en el Museo de Arte Moderno, es asesor.
Con su apoyo, Cleveland tuvo la libertad para seguir su visión ambiciosa para el sitio.
“Todo el mundo del arte va a ser gratuito para cualquiera con una conexión a Internet”, dijo, describiendo un lema de la compañía si no un plan de utilidades. Los ingresos se anticipan de las comisiones de ventas y las asociaciones con las instituciones.
Pero Art.sy sigue lejos de tener a todo el arte del mundo – el Proyecto de Arte de Google, otro depósito de imágenes, tiene casi el doble de su tamaño – y el genoma es sólo tan vigoroso como su limitada colección.
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