RICHARD HAMILTON. POP ART EN EL MUSEO REINA SOFÍA
Richard Hamilton. Pop Art en el Museo Reina Sofía
03 julio, 2014 | Por María Jesús Burgueño | Categoría: Noticia destacada | Imprime esta noticia
El Museo Reina Sofía ofrece lo mejor de Richard Hamilton.
Más de 250 obras, realizadas entre 1949 y 2011
Se trata de la mayor retrospectiva hasta la fecha sobre la obra de Richard Hamilton (Londres, 1922 – 2011), figura clave del Pop Art y uno de los artistas británicos más influyentes del siglo XX.
Organizada por el Museo Reina Sofía, esta exposición es el último proyecto expositivo en el que participó directamente el artista, y ofrece un exhaustivo recorrido retrospectivo por su trabajo, a través de una selección de más de 250 obras, realizadas entre 1949 y 2011, en una gran variedad de medios, géneros y temáticas.
En la exposición se pueden ver las obras más conocidas de Richard Hamilton, su diseño para la cubierta del popularmente conocido como “White Album” de los Beatles; o sus series pictórico-fotográficas Swingeing London 67 y My Marilyn. Además, en la muestra se han recreado varias de las instalaciones expositivas que Hamilton diseñó (o en cuyo diseño participó activamente) en los 50, como Growth and Form, Man Machine and Motion, Fun House y an Exhibit.
A través, sobre todo, de la apropiación y recontextualización de imágenes pre-existentes, Hamilton logró construir un incisivo y polifacético discurso iconográfico que, bajo su aspecto lúdico e irónico, planteaba una reflexión crítica, no exenta de un cierto componente de fascinación, sobre la sociedad de consumo y el imaginario mediático contemporáneo. La exposición también analiza el diálogo que en muchos de sus trabajos Hamilton estableció con la obra de otros creadores, en especial con Marcel Duchamp.
Fecha: 27 junio – 13 octubre, 2014
Lugar: Edificio Sabatini, Planta 3
Comisariado: Vicente Todolí y Paul Schimmel
Itinerancia: Tate Modern, Londres (13 febrero, 2014 — 26 mayo, 2014)
Organización: Museo Reina Sofia
Con el patrocinio de: Fundación Abertis
Lugar: Edificio Sabatini, Planta 3
Comisariado: Vicente Todolí y Paul Schimmel
Itinerancia: Tate Modern, Londres (13 febrero, 2014 — 26 mayo, 2014)
Organización: Museo Reina Sofia
Con el patrocinio de: Fundación Abertis
Si el artículo te ha interesado, contempla la posibilidad de suscribirte. Es gratis.
Noticias relacionadas:
- El Reina Sofía organiza la mayor retrospectiva de Richard Hamilton
- El Museo del Prado abre sus puertas al Pop Art
- El Reina Sofía y el Thyssen ofrecen una entrada conjunta de 13 euros para Hamilton y Mitos del Pop
- Concierto de Caribou en el Museo Reina Sofía
- A Propósito de Richard Serra, en la Fundación Mapfre
CULTURAL / ARTE
ResponderEliminarRichard Hamilton: corrigiendo injusticias po(p)éticas en el Museo Reina Sofía
JAVIER MONTES @ABC_CULTURAL / MADRID
Día 30/06/2014 - 18.25h
La muestra que acaba de presentar el Museo Reina Sofía pone un poco de orden en la leyenda de Richard Hamilton. Sin duda, a él se debe el cuadro fundacional del movimiento pop. Pero, como revela la exposición, fue un creador polifacético
Richard Hamilton: corrigiendo injusticias po(p)éticas en el Museo Reina Sofía
EFE
Detalle de la reconstrucción de «This is Tomorrow», en la retrospectiva sobre Hamilton del Museo Reina Sofía
Todos los iconos nacen de malentendidos. Y a lo mejor la frase misma es un pleonasmo, porque puede que todos los iconos sean malentendidos. Sobre iconos y equívocos culturales trabajó toda su vida Richard Hamilton, y él mismo fue víctima de alguno: es una verdadera injusticia poética (o injusticia pop, y hasta ética) que un autor tan diverso en su técnica y sus influencias intelectuales, con tantos intereses y facetas como los que pueden descubrirse en esta expo del Museo Reina Sofía, haya pasado a la Historia para el gran público como el autor de un solo gran éxito icónico. Un one hit wonder, en el idioma del pop: El celebérrimo collage de 1956 ¿Qué es lo que hace que las casas de hoy sean tan diferentes, tan atractivas?, reproducido hasta la náusea como primera obra pop.
Porque es verdad que en el collage de marras cristalizaron muchos aires de aquel tiempo, pero también nacía de la influencia de artistas americanos pre-pop (uno piensa en Charles Demuth), de cinco siglos de arte europeo (de la perspectiva renacentista a las vanguardias) y del trabajo en grupo del Independent Group, un colectivo laxo de artistas e intelectuales británicos que concibió la muestra This is Tomorrow: una especie de manifiesto que sirve de contexto para esa obra concreta (eso lo han entendido muy bien los comisarios de esta expo, que lo sitúan como preámbulo a la protoinstalación reconstruida para la que sirvió de tarjeta de presentación).
Una imagen nítida
Así que al final, el largo paseo por esta mega-retrospectiva, junto a los ensayos importantes de Buchloh o Hal Foster en el catálogo, sirve para obtener una imagen más nítida de Hamilton y de toda la génesis complicada, a los dos lados del Atlántico, del arte de posguerra.
www.abc.es
ResponderEliminarPor pura chiripa
Lo que sí es cierto es que a lo largo de toda su vida le interesaron todas estas cuestiones de la perspectiva y el punto de vista, de la comunicación y los pactos de entendimiento entre artista y público. Cuando pintaba y montaba exposiciones, cuando fotografiaba y se deja fotografiar, el arte funcionó para Hamilton como metáfora de la comunicación: de sus malentendidos, sus fracasos anunciados y sus hallazgos por chiripa.
De nuevo los equívocos y los puntos de vista cambiantes: Hamilton fue un artista «total» que mezcló sin atragantarse el principio de indeterminación de Heisenberg, la noción de paralaje de los arquitectos clásicos (ese desplazamiento aparente de los objetos en función de nuestra posición) y la subversión relativista de Duchamp. Entendió pronto que los iconos de la cultura de masas eran un buen vehículo para tantear las posibilidades de un arte nuevo.
Hamilton estuvo rápido a la hora de entender el «marketing» como una de las Bellas Artes
Ahí están sus exploraciones tempranas de la percepción en la serie Trainsition, que tiene que ver con algo tan inglés como el viaje en tren y los cambios de perspectiva que experimentaba al mirar por la ventanilla (también en el título: Train-I-sit-on, el tren que me lleva). O los montajes de exposiciones pensadas como instalaciones en las que el visitante se vuelve autor, y quizá incluso obra: verdaderos «penetrables», por tomar el término prestado a Oiticica, que expondría en la Whitechapel diez años después de This is Tomorrow.
Y sobre todo, una serie de polaroids fascinantes, realizadas en 40 años por la plana mayor del arte contemporáneo mundial: Hamilton viajaba con su cámara y pedía a sus colegas que le retrataran: lo que resulta es un emblema de su trabajo y los cambios que introdujo en el arte de la segunda mitad del XX. ¿Son obra de Hamilton o de quienes apretaron el botón? ¿Son retratos del retratado o del retratista? Quizá, en realidad, como esta expo, lo sean de toda una época.
www.abc.es