Lo que los mosaicos romanos revelan sobre el arte antiguo Mosaico de Bailarines Báquicos, Hatay, Turquía. Tiempo estimado de lectura: 6 minutos • Última actualización: 02.20.19 Los mosaicos romanos se componen de imágenes geométricas y de figuras creadas por arreglos de pequeñas piezas de piedra y vidrio. Las formas más tempranas de mosaicos grecorromanos fueron concebidas en Grecia a fines del siglo V aC Aunque los griegos refinaron el arte de los mosaicos figurativos incrustando guijarros en el mortero, los romanos ampliaron esta técnica establecida, usando teselas, cubos de piedra, cerámica, o vidrio: para formar diseños intrincados y coloridos. Hoy en día, estas obras ofrecen una imagen vívida de la antigua vida romana; un vistazo a las actividades cotidianas de una antigua civilización que incluyó concursos de gladiadores, deportes y agricultura, al mismo tiempo que sirve como documentación de artículos cotidianos com...
El Flautista, 1621
ResponderEliminarLa pintura holandesa de esa época solia encerrar significados simbólicos profundos. Hay un dramático manejo de las luces y las sombras, revelan la influencia de Caravggio. Se insinúa el tenebrismo. Fue miembro de la Escuela de Utrecht.uno de los primeros difusores de las ideas de Caravggio en el norte de Europa. Se lo considera el antecedente de Vermeer. Es posible que el cuadro represente una personificación de la música (instrumento de viento, en este caso). En el superior de las cuerdas. El sombrero de terciopelo oscuro da relieve a su perfil.También puede ser una representación del sentido del oído. Esa silueta recortada contra un fondo plano, está vista de cerca y llena la mitad del espacio. La figura está bien delineada.
ResponderEliminarTer Brugghen fue, junto con Gerrit van Honthorst, uno de los miembros más destacados de la escuela de los caravaggistas de Utrecht. La ciudad de nacimiento de este artista no se conoce con seguridad, mencionándose Utrecht y La Haya como posibles lugares. Sin embargo, la documentación conservada en La Haya sobre su padre, el jurista Jan Egbertsz. ter Brugghen, ha llevado a pensar que su nacimiento tal vez se produjera allí. Ter Brugghen estudió en Utrecht con Abraham Bloemaert, y viajó para completar su formación, hacia 1605, a Italia, residiendo en Roma unos diez años, y donde estableció contacto con los círculos de pintores caravaggistas, como Carlo Saraceni y Orazio Gentileschi, de quienes aprendió la técnica del claroscuro. A pesar de esta prolon - gada estancia no se conoce ninguna pintura de su etapa romana. En 1614 está documentado de nuevo en Utrecht, ciudad en cuyo gremio se registró, junto con Thijman van Galen, con quien había regresado desde Italia. De este mismo año data su primera obra conocida: La cena de Emaús (Toledo, Ohio, Museum of Art). La crítica ha pensado, aunque no se dispone de datos, que el artista pudo realizar un segundo viaje a Italia hacia 1620, fecha en la que en su obra se detecta con mayor fuerza el tenebrismo. Su permanencia en Utrecht, desde 1622, está atestiguada por una serie de documentos; allí murió en 1629. Su producción se fecha entre 1615 y 1629, y en ella destacan los temas religiosos y las escenas de género, de las que son especialmente notables sus figuras de flautistas y muchachos, construidos con tonos oscuros, contrapuestos a fondos claros que anticipan en algunos aspectos la pintura de Vermeer. Su obra se ha dividido en dos periodos: uno temprano, entre 1615 y 1624, que corresponde a los primeros años tras su regreso a Utrecht, y un segundo, desde 1625 hasta 1629, conocido como su periodo de madurez. Entre sus mejores creaciones están La vocación de san Mateo, de 1621, del Central Museum de Utrecht, San Sebastián, de 1625, en el Allen Memorial Art Museum del Oberlin College, Ohio, y La Crucifixión, realizada hacia 1625, del Metropolitan Museum de Nueva York. Sus pinturas se consideran un nexo importante entre la Roma barroca y la escuela holandesa de Delft.
www.museo.thyssen.org